Dios nos saca de Egipto.
Egipto es el lugar de la idolatría, donde somos esclavos de los ídolos, es decir de nuestras pasiones, donde pensamos que hacemos nuestra voluntad al desobedecer a Dios, y, hacemos la de los demonios
Solos como los judíos nuestros padres, no podemos salir, pero Dios por su Misericordia, envía al Nuevo Moisés a rescatarnos, este Moisés no es otro que su Hijo Jesús que nos salva por el Agua y la Sangre de su Costado.