¿Cuantas veces me he sentido fuera de la presencia de Dios?
Nunca lo he estado, pues en Él vivimos nos movemos, y
existimos, pero si es cierto que no siempre he sido consciente de ello, tampoco
he tenido nunca experiencias místicas, ni seudo místicas. Gracias a Dios
Pero desde niña, la adolescencia fue otra etapa, si supe y
me alegro y me alegra saber que nunca estoy sola Que Los Tres, que son El Uno,
están siempre conmigo, incluso cuando yo, estoy con ellos, con Él
Me alegra saber que está conmigo no como policía, sino como
Padre, Amigo, Hermano
Por eso me dan pena, y risa los que se asustan del derrame
de un poco de sal, los que consultan brujos y adivinos, los que no saben que
son amados por Dios, aunque haya veces que Dios lo disimule