Permanecer de pie en el monte, ante El Señor
El monte es el lugar de la Revelación de Dios, del Encuentro con Él, porque el monte simboliza la Transcendencia, en el monte Dios habla con sus profetas, Elías, Moisés
En el monte del Calvario, Jesús el Profeta de Nazaret, el Hijo amado permanece de pie ante el Padre, orando por sus asesinos que son sus hermanos
Está de pie, sujeto pro clavos, para no venirse abajo
Y, de pie ya en el monte de La Gloria lo verá Esteban, el testigo
Nosotros también por ser parte de Jesús por nuestro bautismo hemos de permanecer en pie en el monte del Señor, de pie ante él
Pero este monte, no es un monte físico
Este monte es nuestra conciencia rectamente formada
Este monte es La Palabra del Señor
Este monte es sobre todo La Iglesia, y, ahí hemos de estar de pie, sujetos por los clavos del amor, de la penitencia, de la esperanza de la fe, para escuchar y acoger la voz de Dios y llevarla al mundo
Para obedecer a Dios y no al mundo
Y, como Dios lo puede todo, puede hacer que incluso estando de rodillas, estemos de pie
Lo que no podemos nunca es estar tumbados, es decir durmiendo a la bartola