Estudio bíblico Jesús caminando sobre el mar, el lago de Genesaret
Primera Mt. 24, 22-33
Jesús los obligó a subir a la barca, mientras él despedía a la gente. Se fue a orar solo al monte
La barca ya estaba en medio de la mar, zarandeada por las olas, pues el viento le era contrario.
Hacia la cuarta vigilia, vino hacia ellos caminando sobre el mar, al verlo se asustaron, y, decían es un fantasma. Jesús les dijo, ánimo, soy yo, no temáis. Pedro respondió, Señor mándame ir a ti, sobre las aguas, Él, le dijo, ven
Bajo Pedro y se puso a caminar sobre las aguas; yendo hacia Jesús, pero viento la violencia del viento, le entro miedo, y comenzó a hundirse, y grito
Señor Sálvame
Al punto Jesús, le tendió la mano, asió del, y, le dice, hombre de poca fe, porque has dudado
Subieron a la barca y amaino el viento, entonces los que estaban en la barca, se postraron, diciendo verdaderamente eres Hijo de Dios.
Tempestad, Jesús caminando sobre el mar, el lago, Mc. 6, 45-52
Inmediatamente obliga a sus discípulos a subirse a la barca, y, a ir por delante hacia Betsaida mientras él despedía a la gente. Después de despedirse de ellos. Se fue al monte a orar
Al atardecer estaba la barca en medio del mar, y, él solo en tierra, viendo que se fatigaban remando, pues el viento les era contrario. A eso de la 4º vigilia, de la noche, vino a ellos caminando sobre el mar, quería pasarles de largo, pero ellos viéndole caminar sobre el mar, creyeron que era un fantasma, y, se pusieron a gritar pues todos le habían visto, y, estaban turbados; pero él entonces les hablo, “ánimo soy yo, no temáis”; subió entonces con ellos a la barca, y, amainó el viento.
Quedaron estupefactos, pues no habían entendido lo de los panes; si no que su mente estaba embotada
Estudio bíblico Jesús caminando sobre el mar, el lago de Genesaret
Juan 6, 16-21
Al atardecer bajaron sus discípulos a la otra orilla del mar, y subieron a la barca, se dirigían al otro lado del mar, a Cafarnaúm. Había ya oscurecido, y Jesús todavía no había venido donde ellos. Soplaba y el mar comenzaba a encresparse, cuando habían remado 25 o 30 estadios, ven a Jesús, que caminaba sobre las aguas, y se acercaba a la barca, y tuvieron miedo, pero él les dijo: “soy yo, no temáis”
Quisieron recogerlo en la barca, y, enseguida la barca tomó tierra en el lugar a donde se dirigían
Estudio Mateo
“Jesús los obligó a subir a la barca”, mientras él despedía a la gente. Se fue a “orar solo al monte”
Partiendo siempre de lo dicho por Pablo, de que todo lo que hay en La Escritura, para nuestro bien, fue escrito, o dicho
Está diciendo que Jesús no se limita a despedirse de ellos, ni les aconseja que se embarquen, sino que les obliga, es decir que les manda, los quiere en la barca, en la barca de Pedro, cuando La Comunidad de Mateo, escribe este texto, La Iglesia ya está en marcha, por lo tanto aquí hay por parte del autor una intención eclesial. Jesús quiere los redimidos, que sus discípulos estén en la Iglesia
“orar solo al monte”; El monte para los judíos, y, los cristianos procedentes del judaísmo, evoca sobre todo el Sinaí, si nos vamos al Éxodo 24, 12-18; Moisés habla es decir ora, con Dios a solas en el Sinaí, Moisés es el libertador y el primer legislador del pueblo judío, al presentarnos a Jesús, orando solo en el monte, nos lo está presentando como lo que es el Nuevo Moisés, solo que un Moisés más perfecto, puesto que es Dios y hombre, el Nuevo y definitivo Legislador, él que trae la ley del Amor, y, el que libera del pecado y de la muerte, tal como según La Escritura había dicho Moisés, “Dios suscitará un profeta como yo, a él escuchareis, quien no lo haga será borrado del pueblo” Dt. 18,15
La barca ya estaba en medio de la mar, zarandeada por las olas, pues el viento le era contrario
Parece ser que el mar interior de Galilea, es violento, tal vez precisamente por eso, pero aquí hay que ir más lejos, la barca está en medio del mar, es decir está alejada, del lugar del que partió, y, del punto al que se dirige, en tierra de nadie, o mejor dicho en mar abierto, aunque sea un mar cerrado, las olas la zarandean, la mueven de un lado a otro, porque el viento es contrario
No hay que pensar mucho, para ver que nos esta presentando a la Iglesia, en este momento a la Iglesia primitiva, la Iglesia de raíces judías, compuesta por judíos, pero que ya se ha alejado de las viejas tradiciones, esta en medio del mundo del mar, lo viejo le queda aun estando cercano muy lejos, pero aún no ha llegado a la meta, al Cielo, las olas, las persecuciones, los cismas que ya han empezado, las añoranzas del pasado, la hacen tambalear, da la impresión de que todo va acabar, el viento, es decir la sociedad les es contraria hasta los suyo.
vino hacia ellos caminando sobre el mar, cuando ya lo ven, todo perdido, sienten que Jesús viene hacia ellos, dándoles fortaleza, su vida, su recuerdo su presencia, se impone en el mar turbulento, camina sobre el mismo, pero de pronto, un fantasma, es el grito que se escapa de su boca, un fantasma, una ilusión, es inútil pensar que esta con ellos, que podrán con todo, que la Iglesia, la barca no será destruida, son tantas cosas en contra, que lo demás es un sueño, una ilusión una fantasía, el Jesús caminando sobre el mar, sobre la realidad que les es contraria, dándoles la entender que se puede sobrevivir en medio de un mundo hostil, no es más que un sueño de lo que les gustaría que fuera
Ánimo soy yo, no temáis; pero Jesús los tranquiliza no es una ilusión es en realidad Él mismo, caminando sobre el mar, porque es El Señor de la Creación, quien ha creado el mar, como no va poder caminar sobre el mismo, es Él que viene en su auxilio en medio de ese mar tormentoso, para indicarles que es ahí, cuando arrecia el peligro, cuando más cerca lo tienen, en medio de las pruebas de las persecuciones está él
“Señor mándame ir a ti, sobre las aguas”, Pedro se da cuenta, descubre que es El Señor, que es Jesús, y, para sacarse todas las dudas, no le pide que las aguas, se vuelvan tierra firme, no pide desaparezcan las tribulaciones, los problemas; le pide simplemente que lo mandé ir a él, sobre esas aguas enrarecidas, sobre esos problemas, esas tribulaciones, y, él responde.
“Él, le dijo, ven” Jesús le manda, ir, de pronto se ve con fuerzas para hacer frente a lo que le parecía imposible, pero de pronto
“Violencia del viento, le entró miedo, y comenzó a hundirse, y gritó
Señor Sálvame” de pronto ve, que bajo sus pies no tiene tierra, tiene el mar embravecido, y, es un hombre no un pez, es decir ve que la situación le sobrepasa, y, es solo un hombre que va acabar hundido, pero no se va dejar hundir, porque su fe, no se ha achicado ni un poco, sabe que allí está Jesús, su Maestro, su Amigo, su Señor, por eso grita, Señor Sálvame. Reconocimiento de que sin él no podemos nada, la oración
Al punto Jesús, le tendió la mano, asió del, y, le dice, hombre de poca fe, porque has dudado
Pedro, comprende que no puede caminar sobre el agua, sobre el mar, no puede él solo, como simple hombre vencer la tempestad, hacer frente a todo aquello que los amenaza, pero con Jesús si
Subieron a la barca y amaino el viento
Suben a la barca Jesús y Pedro, Jesús sigue en la Iglesia en la Barca de Pedro, y, el viento ruge fuera, dentro de La Iglesia, se experimenta que Dios está allí, y, esto lleva a la confesión de Fe, y, a la adoración, porque la seguridad viene de Jesús, y de saber que Jesús es el Hijo de Dios
Se postraron diciendo verdaderamente eres “Hijo de Dios”
Comparar con Marcos y Juan
Si comparamos con Marcos, hay algunas diferencias debido a que se trata de otra Comunidad, primero voy anotar las semejanzas, en ambos, “les obliga a subir a la barca; mientras él despide a la gente. Mateo, hace hincapié que se fue al monte, a orar solo. Lo ya comentado que recuerda a Moisés, Marcos, solo dice que se fue al monte a orar, no dice que fuera solo, solo que fue orar al monte; tal vez incluso lo copiara “del Mateo” que se perdió. Esta es una de las diferencias, para Marcos no hay que hacer ver, a La Comunidad que Jesús es el Nuevo Moisés, si un hombre que ora, que trata a Dios; otra diferencia, Mateo, no dice adónde van, Marcos si, van a Betsaida, por mandato de Jesús, “por delante del”, es decir como sus embajadores, sus enviados, en suma sus Apóstoles, esto seguramente sea histórico en el sentido literal, verdad, verdad es todo. Pero tiene su mensaje, ellos van, son enviados para preparar sitio al Maestro, no para asentarse ellos, su viaje a Betsaida, solo tiene un móvil, que Jesús pueda ir, sea acogido, esa es la misión de todo apostolado cristiano
Mateo, presenta la barca zarandeada por un mar contrario, pero Marcos añade algo más, y, ese algo es que, “el, Jesús estaba solo en tierra”, como una desconexión, pero Jesús no los olvida
Mateo dice que hacia La cuarta vigilia, vino hacia ellos caminado sobre el mar, pero Marcos añade algo más, dice que fue hacia ellos, al verlos agobiados remando, contra un mar que les era contrario, va pasarles de largo no en el sentido de abandono, si no de preparar el lugar, pero ellos al verlo se asustan, y, lo toman por un fantasma, algo irreal, que no puede ser, lo mismo sucede en el relato de Mateo
Pero en Mateo, Pedro pide caminar con él sobre las aguas, en Marcos, Jesús sube a la barca, de la que no ha salido Pedro, Pedro no abandona la barca (Marcos es el evangelista de Pedro); en Mateo Pedro vacila, y se empieza a hundir hasta que Jesús lo agarra, suben Jesús y Pedro a la Barca, y, se calma la tempestad, Jesús devuelve a Pedro a la Barca, y, sube él, todos se postran y, reconocen confiesan su Mesianidad. Jesús está en la Barca de Pedro, con Pedro. En Marcos, no sube Pedro, porque no dejo la barca, el que sube es Jesús, se hace patente la Barca De Pedro, en la Iglesia, en La Comunidad. Todos se postran y confiesan más su divinidad que su Mesianidad
Comparar con Juan
yendo al texto de Juan, vemos notables diferencias, y un sentido completamente distinto.
“Al atardecer bajaron sus discípulos a la otra orilla del mar, y subieron a la barca, se dirigían al otro lado del mar, a Cafarnaúm. Había ya oscurecido, y Jesús todavía no había venido donde ellos. Soplaba y el mar comenzaba a encresparse, cuando habían remado 25 o 30 estadios, ven a Jesús, que caminaba sobre las aguas, y se acercaba a la barca, y tuvieron miedo, pero él les dijo: “soy yo, no temáis”
Empieza hablando del atardecer, de cuando el día se oscurece, se ve más cerca la noche que el día; es decir esta yendo a la Creación, donde en el Génesis se nos presenta que paso una tarde, paso una mañana, aquí también en la Nueva Creación, de la que somos parte, hay tarde, y, hay mañana, es decir hay pruebas hay miedo, hay alegría
Los discípulos suben a la barca, a la Iglesia, por propia voluntad, un recuerdo de que los cristianos lo eran, lo somos libremente. De nuevo nos trae la oscuridad, algo muy recurrente en Juan, “había oscurecido”, noche de fe, de prueba muy dura, tan dura que sienten a Jesús muy lejos, “y, Jesús todavía no había venido donde ellos. Soplaba y el mar comenzaba a encresparse” Sin Jesús, sin Fe, con pruebas como las primeras rupturas, las persecuciones que parecen devorarlos, simbolizados en el mar encrespado, tienen miedo, de pronto notan que Jesús puede al mar, camina sobre él, y tienen miedo, miedo de que no sea más que una ilusión, miedo de ser indignos, Jesús los tranquiliza, “soy yo no temais”, Jesús es siempre él mismo, no hay que tener miedo a la tempestad
Quisieron recogerlo en la barca, y, enseguida la barca tomó tierra en el lugar a donde se dirigían
Quieren recogerlo en la Barca; como hará la Magdalena en el episodio de la Resurrección por cierto, también de Juan, es decir una fe con plena seguridad, una Iglesia segura pero cuando quieren hacerlo, la barca ya había llegado al lugar a donde se dirigía, a Cafarnaúm, puede que la lanchita que da pie a la historia si, pero a donde se dirige La Barca de Pedro es a la Casa del Padre, a donde Jesús nos lleva la delantera
Por cierto en Juan, tampoco Pedro abandona la barca, Pedro nunca dejaría a su Comunidad, la autoridad sigue ahí, a pie de timón
Ver semejanza con los textos de la Resurrección en Mateo
En Mateo 28, 16 Es Jesús quien se cita con los discípulos en un monte, lo mismo que antaño Dios se había citado con Moisés, ahora es Jesús quien queda con los suyos en la montaña, en el monte. En el relato que Mateo hace de Jesús caminando sobre las aguas, es Jesús, quien va solo a orar a la montaña, como Moisés, ahora no está solo está con los discípulos, no puede ser menos, porque con Jesús forman el Cuerpo místico, además si antes se presentaba como Moises, ahora sin dejar esa comparación, Jesús está como Dios con el Padre. Los discípulos que habían dudado al verlo caminar sobre el mar. Dudan ahora al verlo resucitado, les cuesta entender que Jesús sea Dios, pero se fían y, aunque sea dudando lo adoran como tal
Ver semejanza con los textos de la Resurrección en Marcos
En Marcos 16, 7, hay un versículo que en apariencia parece no tener mucha relación, pero que leído con calma, nos lleva al inicio, “ id a decir a sus discípulos que vayan a Galilea, allí le verán”, pues bien, este relato, empezaba con la orden de Jesús, de ir a un determinado sitio, donde se encontrarían
En 16, 14 les reprocha su incredulidad. Que es lo mismo que hará al subir a la barca, símbolo de la Iglesia
Semejanza textos resurrección en Juan
En los textos de las Apariciones del Resucitado en Juan, hay también un gran paralelismo, o semejanza con este episodio
En Jon. 20, 17, vemos que la Magdalena trata de retenerlo, de tocarle, pero Jesús no se lo permite, la manda anunciarlo a sus hermanos, y, le da el motivo por el cual no puede tocarle, un motivo misterioso al menos para mi, por ahora. “aún no he subido al Padre”, en el episodio que estoy desarrollando, estudiando, en Jon, 6, 16-21; quieren retenerlo, tomarlo en la lancha, la barca, pero no pueden hacerlo, cuando quieren hacerlo ya están en la otra orilla, “en gallego por cierto la otra orilla, O Alen, es también la Vida eterna”, nuestro destino final, a Jesús solo lo tendremos plenamente en el Cielo, como aún me falta para acabar no entro ahora con el significado de este no poder acogerlo en la barca, que significa lo mismo que en el caso de La Magdalena, Jesús no es de nuestra propiedad, es al revés
En el mismo relato de Jn 6, 16-21, al verlo caminar sobre el mar, sienten miedo no dice explícitamente que lo tomaran por un fantasma, pero si tuvieron miedo fue por algo, lo que se dice es que Jesús, los calma diciendo
“Soy yo, no temáis”; y, en Jn 20, 19 -31, se hace presente con el saludo de la Paz, mostrándoles las manos y el costado, es decir revelándoles que ha vencido a la muerte.
Aquí no hay miedo, no hay temor, hay alegría, muy distinto de los otros Evangelios sin contradecirlos
Está hablando de Una Iglesia firme, al menos en ese momento
Significado eclesial primitiva Iglesia
Los Evangelios nacen en las distintas comunidades; cada una con sus propios problemas, todas son La misma Iglesia, pero los problemas no son los mismos, y, así ha de verse
Sin negar ningún otro carácter
En la Comunidad de Mateo, comunidad judeo cristiana, son cristianos que vienen del judaísmo, y, que sufren persecución por los gentiles, y, por los propios judíos, ven la Iglesia sacudida por las persecuciones, creen en Jesús, pero arrecian las dudas, paso ya tiempo, lo ven como una ilusión, hasta los dirigentes, Pedro vacilan, Pedro quisiera ir a Jesús, que todo fuera seguro, como antes, cuando Jesús estaba físicamente, pero surge el miedo, con todo Jesús sostiene a su Iglesia, él esta en ella, entra a ella, la tempestad se calma
La Comunidad de Marcos, que es la de Pedro, los mismos problemas, pero La Jerarquía no duda, es la Iglesia de Roma, Pedro no se baja de la barca, no deja su lugar, Jesús sube a la barca, hay seguridad, habían dudado en vano, con Jesús todo seguro
La Comunidad joanica, es mixta y sobre todo, hay judeo cristianos que han sido expulsados de la Sinagoga. Soplan vientos contrarios, persecuciones, primeras divisiones etc. pero Jesús acompaña la barca de la Iglesia, no sube a Ella, es decir, no saca las pruebas, no se hace aprehensible, pero acompaña, y conduce la Iglesia al Padre
Significado eclesial
La Iglesia es la barca de Pedro, y, a esa barca la acecha los vientos contrarios, persecuciones, disensiones, herejías, etc, Jesús va con Ella, llevándola al Padre, a donde le ha dado orden de llegar. Pedro, va en la barca, pero Pedro, también es hombre, los papas no siempre han sido ejemplares, y, siente miedo, necesita ir a Jesús, vencer el mal, hacer que el agua, sea sólida, los problemas desaparezcan. La realidad se impone, pero Jesús no deja que se hunda Pedro, no deja que el Papa caiga en el error, y arrastre consigo a la Iglesia, con el Papa, con Pedro, Jesús sube a la barca. Pedro sigue en la Iglesia y, la dirige, mientras Jesús la guía por su Espíritu Santo, hasta llegar al Padre
Significado para la vida, para mi vida
Jesús, nunca nos deja aunque lo parezca camina al lado, aunque sea en medio de oleaje, aunque todo se nos vea en contra, cuando todo parece hundirse, incluso cuando la oración es sequedad, el rezo aburre, todo se viene encima, el suelo es agua, y, uno no quiere dudar pero se siente tentado a dudar de todo, ahí esta Jesús tendiendo la mano, a veces sin que se note, caso de la Madre Teresa, otras permitiendo una pequeña luz, y, a veces sube a nuestra barca y todo se disipa, y, uno se da cuenta de lo imbécil que fue por dudar, otras pretendemos “apresarlo”; tenerlo todo claro, por qué esto, porque lo otro, él sonríe, como Hermano mayor, pero no se deja apresar, de pronto uno, si ha mantenido su Sí, se encuentra que ha llegado a puerto, Que ha llegado al Cielo
