domingo, 28 de noviembre de 2021

Ser amigo de Jesús


La amistad con  Jesús se basa en aceptar su autoridad. Ser amigos de Jesús, no es tener imagenes suyas, eso es optativo, no es ir a las procesiones de Semana Santa, no es ser de adoración nocturna, ni diurna.
Ojo, no quiere decir que un amigo de Jesús no pueda hacer todo eso, claro que sí, y, es algo muy bueno, pero no se es amigo por eso
Lo dice Él mismo, “No os llamó siervos, sino amigos, sois mis amigos si hacéis lo que yo os mando”
Ahora sólo precisamos saber lo que nos manda
Lo tenemos en los Evangelios
Nos manda amar a todos, incluídos a los enemigos
Nos manda no negarlo
Nos manda preferirlo a todo
Nos manda obedecer al Papa
Nos manda no escandalizar
Nos manda amar lo y acogerlo en todos los seres humanos
Nos manda orar en todo tiempo
Nos manda guardar el Decalogo
Nos manda comer su Cuerpo y su Sangre, para que vivamos en Él y Él en nosotros, le da igual como lo hagamos, si de rodillas o sentados, o de pie, si en la boca que es obra de Dios o en la manos que son obra de Dios
Todo lo que exceda de ahi, no es mandato suyo, se puede hacer pero no indica ser amigos
Alguno dirá, somos más que amigos, somos hermanos,sí somos hermanos, pero el amigo en cierto modo, es más que el hermano, hablo del amigo no del conocido, porque el hermano te toca, uno no elige tener hermanos, hay hermanos que se odian, y, el amigo es un hermano que no lleva tu sangre, pero que Dios te ha dado y tú has aceptado
Por eso, ser amigo de Jesús es aceptarlo y hacer lo que le gusta, hacer su voluntad.