viernes, 4 de enero de 2019

A veces se confunde la Voz de Dios


A veces se confunde La Voz de Dios con el clamor humano, y, con la voz humana

Y, eso es peligroso, porque uno puede acabar apoyando injusticias, y, pensando que está obrando bien, cuando es todo lo contrario. Por eso hay un truco, tratar a Dios en la oración personal, hablar con Él, presente en el Sagrario, en La Escritura, de la Mano de La Iglesia, no de la iglesia, y, así poco a poco, la iremos identificando, y, no, nos confundiremos

Y, cerrando las puertas del corazón, para hablar con nuestro huésped divino, sin interferencias