Alabar y dar gracias a Dios por mi vida, por toda vida
Todos deberíamos cada día, dar gracias a Dios por la vida, la vida humana propia, esa que Dios nos dío por nuestros padres, y, nos conserva, sin la cual la sobrenatural sería imposible
Dar gracias por las demás vidas humanas, también las de los enemigos quien los tenga, porque son medios de Dios para hacernos crecer, y, como no por las vidas de los que queremos
Deberíamos bendecir y agradecer a Dios ante un niño, un bebé, una madre que da a luz, un bebé gestante es decir una mujer embarazada, porque ahi, está pasando algo más de un milagro
Y, luego agradecer por todas las demás vidas, puestas por Dios a nuestro servicio y cuidado, no abuso y explotación
Desde el sencillo lirio, la hierba, al mar embravecido o sereno, al clamoroso rio, o la catarata, desde el jilguero al águila real, del león al gatito, de la humilde vaca y la humilde oveja al bisonte etc. Cada uno de estos seres, y criaturas con nosotros son un canto silencioso al Creador, también sus vidas vienen del, él los cuida, y les da el alimento a su tiempo.
Ellos no se desvían de su camino
Sus vidas también son sagradas, podemos tomarlas para la nuestra, no hacerlo por capricho,no son juguetes, son joyas, porque son obra de Dios, y, por ellos hemos de alabar a Dios.
