lunes, 26 de marzo de 2018

Lo dijo bien claro

Lo dijo bien claro, “no volveré a castigar a la tierra”, por ello los desastres naturales no son  obra de Dios

No va a volver otro diluvio, por voluntad de Dios
Los desastres naturales, son culpa nuestra que nos hemos cargado la naturaleza

Dios no manda ni terremotos ni tsunamis

Decir lo contrario es una blasfemia

Como es una blasfemia llamarse profeta, y, si todos los cristianos lo somos por nuestra incorporación a Cristo en el Bautismo, “sacerdotes, profetas, y reyes, pero con Cristo, y, en Cristo”