En el camino hacia Dios, es decir en la vida, pues toda la
vida terrena es una marcha hacia el encuentro definitivo con Dios, es normal
caer en el cansancio, que a veces puede incluso llegar a la noche oscura
Cansancio porque La Escritura nos habla de un Dios Amor,
pero en el mundo no vemos más que maldad
Cansancio. Porque la mayoría de las veces, los que deberían
ser modelo no lo son
Cansancio porque los cristianos somos igual o peores que los
que no creen en nada
Cansancio porque decimos amarnos, pero nos odiamos y nos
dividimos en cientos de Iglesias
Cansancio porque hacemos propósitos de mejorar, y, a los cinco minutos ya los hemos roto
Y, ante este
cansancio surge la tentación de tirar la
toalla, de negarlo todo, o de vivir como si todo fuese nada
Qué hacer entonces
Orar
Reafirmar la fe
Frecuentar los sacramentos
Meditar y orar la Biblia
Agarrarnos a Jesús, si caímos levantarnos. Él cayo 3 veces
camino del Calvario, no dejarnos caídos
Orar sin ganas, y con ganas
Recordar que nadie nos dijo que ir a Dios fuese fácil, es
cuesta arriba, y, ya se sabe que las cuestas, cansan más