El paralítico y sus amigos. Santos y personas corrientes del Nuevo Testamento
Los amigos de este paralítico eran amigos de verdad, ellos no se conformaban con ver a su amigo en una camilla, no había sillas de ruedas, dependiendo de que otros llevaran la camilla
No se contentaban
con estar con él un rato, recordaban cuando su amigo corría, caminaba y saltaba con ellos
E iban hacer todo lo que estuviera en su mano para solucionar lo
Habían oído hablar de Jesús, y fueron a probar suerte, como la camilla no era pequeña la descolgaron con cuerdas por la azotea, agrandado el boquete
Fue un acto imprudente, unas personas prudentes habrían pensado, y, si cae mal y se mata, y, qué pasa con el dueño de la casa, es posible que no le haga gracia que le estropee mis su azotea, y es posible que no le guste le metamos en su patio un enfermo. Y, se hubieran vuelto con su amigo paralítico
Pero sólo pensaron en su amigo
Y, lo que sucedió fue que Jesús curase la parálisis de su corazón y luego la de sus piernas. Los Evangelios lo cuentan muy bien
Pero nada hubiera sido posible. Sin la acción de sus amigos