Orar rumiar la Palabra para expulsar los propios ídolos.
La Palabra de Dios La Biblia no es un libro de lectura, no es que acudir a ella como tal sea malo, es que simplemente es insuficiente
Es preciso penetrar en ella, y dejarse penetrar por ella, por El Espíritu que la inspiró, para expulsar los propios ídolos
Para que nuestro pensamiento, tu pensamiento, el mío, sea acordé con el sentir de Dios
Y, para ello es preciso junto con la oración el estudio
Nunca forzar el texto. Dios habla cuando quiere, y a veces a destiempo
Hay varios métodos, pero él que uno elija, debe ser él que use hasta que encuentre uno mejor