Un parto pobre de una mujer pobre, que parió un niño excepcional
Hubo una vez un parto pobre, de una mujer pobre, tan pobre que vivía en un país sometido, su tierra no era suya.
Un gobernante extranjero lejos de allí pretendía dirigir sus destinos
Y, este gobernante que se creía dueño del mundo, motivo que la mujer pobre y su esposo, tuviesen que dejar su hogar, para poder ser contados como si fuesen ovejas
Debido a que la ley fue para muchos, la mujer pobre y a punto de parir no encontró lugar, tal vez, si pudiesen pagar un poco más, porque ya se sabe, en los hoteles no acogen a los que no pueden pagar su factura
La mujer pobre encontró acogida en una cueva de animales, y, allí parió a su bebé, ella misma lo preparó y lo puso en un comedero de animales, fue un parto excepcional, los Padres de La Iglesia, dicen que los animales que allí había nos representan a gentiles y judíos, pero eso ahora no importa
La mujer pobre, había parido a un niño excepcional, pero pobre, sin casa, y pronto un exiliado por culpa de otro loco, pero ese niño ese bebé indefenso, era es el Verdadero Señor y Dueño, él que venía a vencer al tirano, el Salvador.
Y, no, no era el tirano que iba vencer el extranjero que causó u ordeno el Censo al contrario, también venía a liberarlo a él, venía, a liberar a todos
El Tirano era él que disfrazado de serpiente había engañado, o manipulado a otra mujer madre e hija de aquella mujer pobre, que acababa de parir en una cuadra
La mujer manipulada era Eva
La mujer pobre, pero nadie se engañé Señora y Dueña y Reina de todo, la principal descendiente de aquella, María de Nazaret, La Virgen María, La Virgen Madre.
El bebé Jesús de Nazareth el Verbo hecho debilidad. Hecho hombre
Aquel día seguro hubo muchos partos en palacios, pero la Salvación vino de un parto pobre. De Una Mujer Pobre.
